¿Qué es un electrocardiograma en reposo?
Es una prueba diagnóstica que consiste en el registro de la actividad eléctrica del corazón, mediante un equipo llamado electrocardiógrafo. Lo que mediante una impresión en una hoja especial (milimétrica), muestra esta actividad. Constituye una de las técnicas iniciales (básica), más importantes para el conocimiento y el abordaje inicial de la mayor parte de las cardiopatías.
Preparación para el examen
- Acudir con ropa cómoda.
- No requiere ayuno.
- Tomar sus medicamentos en forma habitual.
- Es posible que algunas personas deban rasurarse el vello del tórax para que los electrodos se puedan pegar.
- No se requiere indicación médica.
Forma en que se realiza el examen
Se trata de una prueba que se realiza con el paciente despierto, acostado en una camilla con el tórax, muñecas y tubillos descubiertos (en estos puntos se colocarán los electrodos y pinzas para la detección de la actividad eléctrica del corazón). Estos electrodos (tórax) y pinzas (Muñecas y tobillos) serán conectados mediante cables a un ordenador que transforma las señales eléctricas en una gráfica de ondas, para ser impreso en papel milimétrico.
Lo que se siente durante el examen
Este examen no causa dolor o síntomas relacionados. Ocasionalmente puede haber una reacción de la piel secundaria a los electrodos pegajosos.
Las indicaciones por las que se realiza el electrocardiograma en reposo
¿Para qué sirve?
Estudio inicial para cualquier valoración cardiovascular.
Ofrece una ayuda inestimable para el diagnóstico del crecimiento de las distintas cámaras cardiacas (aurículas y ventrículos).
Detección de arritmias cardiacas como fibrilación atrial, bloqueos de la conducción, taquicardias, etc.
La detección temprana de un infarto agudo de miocardio, así como la identificación de huellas de infartos previos.
De hecho, el ECG aporta datos importantes para la valoración de más del 80% de las Cardiopatías.
Significado de los resultados anormales
Los resultados anormales pueden incluir diversas arritmias (fibrilación atrial, taquicardia ventricular, bloqueos de la conducción, etc) y en algunos casos cardiopatía isquémica (infartos o arterias tapadas). Información que deberá ser correlacionada con el entorno clínico del paciente.
Riesgos
No hay riesgos asociados con el examen, salvo reacción cutánea a los electrodos (muy poco frecuente).